
¿Mirar o Creer?
"Mirar es más sencillo que creer, y creer es lo único que te lleva a LOGRAR"
Lograr es la meta de un visionario, porque VER tantas maravillas que cambian al mundo, solo cobra un valor eterno, un valor para todo la vida, cuando se completa ese poderoso ciclo de fe, pasamos de CREER A VER.
¡Mira, Ve, Creer y Ponle Corazón!
Corazón, en este artículo, se traduce a trabajar en serio por aquello que amas y que ayuda a otros.
Ahora, esta es la pregunta trascendental que debes hacerte, y con ella desafiarte a no responder solo con un Si, o un No. Responde con la memoria abierta a pensar en el sueño que te supera, que solo puede venir de un Dios inmenso:
¿Estás creyendo en alguna visión que hará de este mundo un mejor lugar para otros, así como para ti?

Paz en el caos de escalar
Escalar trae caos
Aunque pueda sentirse como una montaña imposible de conquistar, el cansancio que deja el escalar, en las fuerzas propias, es intenso hasta el punto de no solo necesitar parar sino desear retroceder.
Después de la decisión extraordinaria de escalar, llega el deseo implacable de descender y volver al valle.A ser simple. A permanecer en una rutina de costumbres impropias.
Escalar trae caos, dolor y conmoción, y escalar es el único camino hacia la verdadera identidad de grandeza que llevas dentro. Hay que volverse alquimista del monte de la Vida para apoyarse en el bastón del Maestro de la Vida, y conseguir la paz entre lo mejor de ti y lo hermoso de este mundo.
Saberse quien se es, es la piedra preciosa entre las rocas comunes de todo el camino, y tener esa natural armonía entre nuestra identidad de grandeza y la identidad del que nos hizo grandes (el Gran Yo Soy, Dios) es la bandera de victoria clavada en la cima.
Después de la decisión extraordinaria de escalar, llega el deseo implacable de descender y volver al valle.A ser simple. A permanecer en una rutina de costumbres impropias.